miércoles, 2 de septiembre de 2015

Castillo Neuschwanstein

El lugar que más quería visitar en el mundo -y no exagero- era el castillo alemán Neuschwanstein. 

Cómo iba a hacerlo? ni idea, pero gracias al destino que conocí a mi amiga, que casualmente vive cerca y ha ido muchas veces... incluso tenido un accidente automovilístico al pie del castillo.

Un jueves lluvioso y nublado, bellísimo para visitar ese lugar de ensueño anclado en medio del bosque montañoso alemán.

Siguiendo este link tendrán información para el visitante.

De hecho son dos los castillos -Hohenschwangau y Neuschwanstein- nostras decidimos solamente recorrerlos por fuera y sacar fotos disfrutando el día, y dejar para otra vez las visitas al interior. Incluso hay excursiones al hermoso lago que está al pie de ambos castillos.

Siete semanas tras la muerte del rey Luis II en 1886 se abrió al público el Castillo de Neuschwanstein. El rey, de carácter retraído, había construido el castillo para poder alejarse de la vida pública – lo que en su día fuera su refugio se ha convertido en un lugar principal de atracción para el público.Neuschwanstein es hoy uno de los castillos más visitados de Europa. Aproximadamente 1,4 millones de personas visitan anualmente "el castillo del rey de cuento de hadas". En verano, se agolpan diariamente más de 6.000 visitantes por unas habitaciones que estaban destinadas a un solo residente.La idílica situación de Neuschwanstein es única. Sin embargo, se deben vigilar constantemente los movimientos en las zona de los cimientos y las escarpadas laderas tienen que ser aseguradas continuamente. También el duro clima ataca las fachadas de piedra caliza, lo que exige continuas medidas de rehabilitación.
De Munich nosotras nos tomamos un tren que nos dejó en el pueblo donde al costado de la estación salen los buses en dirección al castillo, en menos de diez minutos se llega y levantando la vista, en la punta de la montaña se alza este hermoso cisne de piedra blanca, Neuschwanstein. El camino empinado a ambos castillos se puede hacer a pie, pero también hay colectivos y carruajes tirados por enormes caballos que recorren una parte del tramo.
Personalmente disfrute hacerlo a pie, tomar fotografías y ver cada detalle de ese ambiente fantástico. 
Al pie de Neuschwanstein, hay unas tiendas de recuerdos y un mirador. Allí compramos por 5E una taza con café que tiene impreso diferentes motivos y que es un hermoso souvenir, además de que el café estaba riquísimo y venia con una porción de torta o waffle. Perfecto para matar el fresco del día.


















La ultima foto está tomada desde el punte, que ahora no recuerdo el nombre, pero que es otro camino que nace al costado del castillo y vale la pena el esfuerzo.

De regreso comimos un exquisito Apfelstrudel, y culpa de quedarnos charlando, fue que se nos pasó el tren :) 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Alimenta a las mascotas!